Conforme al régimen legal colombiano vigente, la insolvencia identifica la situación de crisis de un deudor, que se traduce en la incapacidad financiera para atender sus obligaciones patrimoniales en la forma y términos como fueron contraídas, contemplando dicho régimen un procedimiento que permite ajustar el pago de tales obligaciones, acorde a las nuevas circunstancias de la empresa o en el caso de empresas no viables, un procedimiento para la liquidación ordenada de su patrimonio.